Un punto repleto de orgullo
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El Oviedo neutralizó en dos ocasiones la ventaja del Lugo en el choque de su regreso al fútbol profesional
Los de Egea fueron de menos a más y gozaron de varias ocasiones para llevarse la victoria en un tramo final en el que acorralaron a su rival
El entrenador azul es poco amigo de las sorpresas y el once que saltó al terreno de juego fue el previsto. El técnico formó con siete jugadores de la pasada temporada y cuatro de los fichajes (los defensas Fernández, Borja Gómez y Peña, junto con el centrocampista Hervías).
Si todos los partidos tienen unos minutos iniciales de tanteo, más el de ayer, el primero de la temporada y el primero para los azules en la categoría después de doce temporadas. También los lucenses estrenaban entrenador.
El Oviedo mostró de inicio el mismo patrón de la pasada temporada, la misma disposición de los jugadores y la misma forma de proceder en la salida de balón y en la presión alta. Sin embargo, enfrente había un rival con menos temores que los rivales del pasado año y que salía bien con el balón desde atrás.
Los locales tenían el balón y parecían querer mandar en el partido, pero las primeras ocasiones fueron para los visitantes. Israel Puerto cabeceó un saque de esquina que salió fuera por poco. Fue el preludio del tanto inicial, favotable a los de Luis Milla.
La acción fue una internada de Carlos Pita en la que nadie se interpuso y, desde el borde del área, lanzó un fortísimo disparo cruzado ante el que nada pudo hacer Esteban. Se iba a cumplir el primer cuarto de hora del Oviedo en Segunda e iba por detrás en el marcador. Sin embargo, el equipo, apoyado desde la grada, reaccionó rápido y logró empatar el encuentro en una acción de estrategia. Susaeta botó una falta desde la izquierda y Jonathan Vila peinó hacía atrás sorprendiendo a José Juan que vio como la pelota se colaba en su portería.
Una vez restablecidas las tablas en el marcador, el conjunto de Sergio Egea volvió a tomar el control del encuentro y volvió a estar cerca de marcar en otra acción a balón parado. La puso nuevamente Susaeta y cabeceó David Fernández, pero en esta ocasión se encontró con el palo.
Los azules no encontraban huecos en el entramado defensivo gallego. Por el centro la acumulación de jugadores impedía tocar, mientras que las bandas sólo funcionaban con suficiente peligro cuando los laterales doblaban a Susaeta y Hervías, que estaban muy bien marcados siempre, con ayudas y mucha presión.
Las pocas ocasiones en las que el Lugo se acercaba a la portería azul lo hacía con mucho peligro. A los 38 minutos, Esteban estuvo providencial en un remate de cabeza de Caballero, al que el meta respondió con una mano abajo que evitó un gol que parecía cantado. Las tablas al descanso dejaban todo abierto para la segunda mitad, después de un primer tiempo igualado.
El Oviedo salió mejor del vestuario y tuvo unos minutos en los que el balón circulaba más rápido ante un Lugo que estaba metido en su campo y esperaba a la contra, desplegándose con peligro. El conjunto visitante se adelantó en un centro desde la izquierda de Ferreiro al que se tiraron Caballero y Fernández, con más fortuna para el delantero, que hizo el segundo.
Los ovetenses volvían a estar por detrás en el marcador y pudieron empatar en una buena acción de Linares al borde del área, que tras forcejear con un par de rivales se hizo sitio para lanzar un fuerte disparo que se estrelló en la portería defendida por José Juan. Sergio Egea movió rápido el banquillo para dar entrada en el campo a Borja Valle en sustitución de Jon Erice. El berciano ocupó la media punta, mientras que Héctor Font se retrasó para hacer pareja en el centro del campo con Jonathan Vila.
Apenas llevaba un par de minutos en el campo Borja Valle cuando estuvo a punto de lograr el empate. Héctor Font le envió un buen pase y el berciano picó de cabeza sobre el portero, pero llegó Dealbert para sacar de cabeza en la línea.
El Oviedo, que tocando no acababa de llegar, lo hizo en una contra. Hervías recuperó un balón y se lo dio a Peña, que buscó a Borja Valle en carrera. El berciano centró a Linares, que le acompañaba y fusiló a José Juan para restablecer el empate.
Los lucenses acusaron el golpe y el Oviedo tuvo unos minutos en los que acorraló a su rival, a medida que el partido se volvía de ida y vuelta. Un centro de Peña lo remató de espuela Borja Valle para que detuviera José Juan. El portero volvió a lucirse ante Borja Valle en un remate tras un saque de esquina a la media vuelta, pero la reacción del meta mandó a corner.
A falta de cinco minutos, Egea dio entrada en el campo a Cervero, que sustituyó a Linares en medio de una gran ovación y pudo marcar en su primera acción, al revolverse bien en el área, pero la defensa se le echó encima. Los azules seguían apretando y Borja Valle volvió a tener otra ocasión, pero se negaba el gol y el empate no se movió.
Si todos los partidos tienen unos minutos iniciales de tanteo, más el de ayer, el primero de la temporada y el primero para los azules en la categoría después de doce temporadas. También los lucenses estrenaban entrenador.
El Oviedo mostró de inicio el mismo patrón de la pasada temporada, la misma disposición de los jugadores y la misma forma de proceder en la salida de balón y en la presión alta. Sin embargo, enfrente había un rival con menos temores que los rivales del pasado año y que salía bien con el balón desde atrás.
Los locales tenían el balón y parecían querer mandar en el partido, pero las primeras ocasiones fueron para los visitantes. Israel Puerto cabeceó un saque de esquina que salió fuera por poco. Fue el preludio del tanto inicial, favotable a los de Luis Milla.
La acción fue una internada de Carlos Pita en la que nadie se interpuso y, desde el borde del área, lanzó un fortísimo disparo cruzado ante el que nada pudo hacer Esteban. Se iba a cumplir el primer cuarto de hora del Oviedo en Segunda e iba por detrás en el marcador. Sin embargo, el equipo, apoyado desde la grada, reaccionó rápido y logró empatar el encuentro en una acción de estrategia. Susaeta botó una falta desde la izquierda y Jonathan Vila peinó hacía atrás sorprendiendo a José Juan que vio como la pelota se colaba en su portería.
Una vez restablecidas las tablas en el marcador, el conjunto de Sergio Egea volvió a tomar el control del encuentro y volvió a estar cerca de marcar en otra acción a balón parado. La puso nuevamente Susaeta y cabeceó David Fernández, pero en esta ocasión se encontró con el palo.
Los azules no encontraban huecos en el entramado defensivo gallego. Por el centro la acumulación de jugadores impedía tocar, mientras que las bandas sólo funcionaban con suficiente peligro cuando los laterales doblaban a Susaeta y Hervías, que estaban muy bien marcados siempre, con ayudas y mucha presión.
Las pocas ocasiones en las que el Lugo se acercaba a la portería azul lo hacía con mucho peligro. A los 38 minutos, Esteban estuvo providencial en un remate de cabeza de Caballero, al que el meta respondió con una mano abajo que evitó un gol que parecía cantado. Las tablas al descanso dejaban todo abierto para la segunda mitad, después de un primer tiempo igualado.
El Oviedo salió mejor del vestuario y tuvo unos minutos en los que el balón circulaba más rápido ante un Lugo que estaba metido en su campo y esperaba a la contra, desplegándose con peligro. El conjunto visitante se adelantó en un centro desde la izquierda de Ferreiro al que se tiraron Caballero y Fernández, con más fortuna para el delantero, que hizo el segundo.
Los ovetenses volvían a estar por detrás en el marcador y pudieron empatar en una buena acción de Linares al borde del área, que tras forcejear con un par de rivales se hizo sitio para lanzar un fuerte disparo que se estrelló en la portería defendida por José Juan. Sergio Egea movió rápido el banquillo para dar entrada en el campo a Borja Valle en sustitución de Jon Erice. El berciano ocupó la media punta, mientras que Héctor Font se retrasó para hacer pareja en el centro del campo con Jonathan Vila.
Apenas llevaba un par de minutos en el campo Borja Valle cuando estuvo a punto de lograr el empate. Héctor Font le envió un buen pase y el berciano picó de cabeza sobre el portero, pero llegó Dealbert para sacar de cabeza en la línea.
El Oviedo, que tocando no acababa de llegar, lo hizo en una contra. Hervías recuperó un balón y se lo dio a Peña, que buscó a Borja Valle en carrera. El berciano centró a Linares, que le acompañaba y fusiló a José Juan para restablecer el empate.
Los lucenses acusaron el golpe y el Oviedo tuvo unos minutos en los que acorraló a su rival, a medida que el partido se volvía de ida y vuelta. Un centro de Peña lo remató de espuela Borja Valle para que detuviera José Juan. El portero volvió a lucirse ante Borja Valle en un remate tras un saque de esquina a la media vuelta, pero la reacción del meta mandó a corner.
A falta de cinco minutos, Egea dio entrada en el campo a Cervero, que sustituyó a Linares en medio de una gran ovación y pudo marcar en su primera acción, al revolverse bien en el área, pero la defensa se le echó encima. Los azules seguían apretando y Borja Valle volvió a tener otra ocasión, pero se negaba el gol y el empate no se movió.
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