A año muerto, año puesto. Con 2014 apurando sus últimos días, conviene pensar ya en 2015. Y para los inversores este ejercicio trasciende lo temporal y adquiere el rango de obligación, porque hay que adaptar las carteras a los retos y las oportunidades que esperarán en el nuevo año -pinche en cada una de las palabras del gráfico para conocer qué espera a cada activo-
Por eso conviene saber lo que opinan los expertos sobre lo que puede hacer la BOLSA, la DEUDA, las DIVISAS y las MATERIAS PRIMAS en 2015. A partir de ahí, será usted quien decidirá si sigue sus consejos o si, por aquello de no dejarse llevar por la opinión mayoritaria, hace justo lo contrario. 
Esta vez, además, hay que tomárselo especialmente en serio. Vamos, que 2015 se presenta con los suficientes matices como para hacer de él un año realmente clave ante el que resulta preciso saber cómo posicionarse. Para empezar, porque nunca antes los ahorradores españoles -ni los del conjunto de la Eurozona- habían empezado un año con los tipos de interés oficiales al 0% -en concreto, en el 0,05%-, algo que condiciona todo su abanico inversor.
Para continuar, porque en 2015 los bancos centrales, con el Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal (Fed) estadounidense a la cabeza, están llamados a ejecutar decisiones históricas. Y para terminar, porque países como Grecia, Rusia o China también prometen emociones fuertes. Sin olvidar, por supuesto, que 2015 también será un año marcado por lapolítica, con elecciones generales, como es el caso de España.