Me ha vencido el depósito: ¿Qué hago con mis ahorros?
José Jiménez
Los depósitos de bancos de primera fila que daban un 4% anual son cosa del pasado, casi productos de otro siglo. Ahora mismo, es muy complicado obtener algo que se aproxime al 1%, en el mejor de los casos.
Los depósitos de bancos de primera fila que daban un 4% anual son cosa del pasado, casi productos de otro siglo.Ahora mismo, es muy complicado obtener algo que se aproxime al 1%, en el mejor de los casos. No solo es que los tipos de interés han caído a mínimos históricos; sucede también que hay menos competencia por culpa de la reestructuración y las entidades no sienten la necesidad de "tirar la casa por la ventana". Por eso, los ahorradores que tienen ahora mismo un depósito y necesitan renovarlo tienen un problema porque con toda seguridad van a recibir menos intereses.
Para abordar esta cuestión y otras relacionados con la gestión de las finanzas personales, el director de Inversiones de Tressis, Víctor Alvargonzález, acaba de publicar el libro "Y yo, qué hago con mis ahorros?" (Deusto), una útil guía para sobrevivir en la negociación con los bancos sin asumir más riesgo del deseado. Hay muchas frases que resumen la filosofía de esta obra, pero hemos seleccionado una que se podría aplicar a todo el libro. "Lo que le interesa al banco está en el escaparate. Lo que le interesa a usted puede estar en la trastienda". Conviene tener esta frase presente cada vez que entre la sucursal para volver a colocar su dinero.
Si piensa que el depósito que le ofrecen da una baja rentabilidad y desea más rendimiento sin jugarse el patrimonio o la disponibilidad de su dinero, le enseñarán otros productos, pero cuidado, "desconfíe de todo lo que supere en exceso la oferta del depósito". Mejor todavía, "confíe pero verifique". En todo lo que le ofrezcan cuya rentabilidad se mueva entre un 1% y hasta un 2% por encima del rendimiento del depósito anual a plazo fijo, lo peor que le puede pasar es que se quede como estaba. Es decir, que no gane nada. Pero de ahí en adelante tiene que saber el riesgo que asume. Por ejemplo, las preferentes eran productos que ofrecían rentabilidades "disparatadamente altas" en relación con los depósitos, advierte Alvargonzález. ¿Qué productos conservadores valen para superar al depósito y dormir tranquilos?
Los seguros de ahorro
"Son el producto ideal para sustituir al depósito si su horizonte de inversión es a un año", apunta el experto de Tressis. Ahora mismo, un seguro de ahorro de una compañía de seguros de primer nivel ofrece algo más del 2% anual. Este interés cumple la condición de no superar en exceso la oferta de los depósitos a un año. Pero lo que ocurre es que la compañía de seguros le va a exigir mantener la inversión doce meses, y si no lo hace, pagará una comisión de reembolso bastante elevada (en torno al 1%). Además, este interés se revisa a los seis meses y puede bajar.
La revisión puede ser al alza o a la baja, eso dependerá de cómo vayan los tipos, pero no será significativa. Esto es así porque la compañía de seguros, para ofrecerle a usted un 2%, probablemente haya comprado bonos al 3% o al 4%. La mayor precaución que debe tener en este caso, como advierte Alvargonzález, es que hablamos "de una inversión a un añoempaquetada en un seguro. Que si estamos hablando de una sencilla inversión a un año vista no le vendan un PPA, un plan de pensiones o cualquier otro producto para toda la vida, que a las compañías de seguros también les gusta cautivar a sus clientes, y mucho". En cuanto a la seguridad del dinero, las compañías de seguros tienen sus supervisores, pero Alvargonzález plantea una cuestión para responder a la pregunta. ¿Cuántas compañías de seguros han salido durante la crisis en los periódicos por tener problemas? ¿Cuántos de sus clientes están poniéndose en manos de abogados por sentirse estafados? Ninguno. Se puede y se debe trabajar con los bancos, pero no son las únicas entidades financieras donde mirar.
Los fondos de rentabilidad objetivo
Ofrecen una remuneración superior al depósito a plazo fijo y si ese interés no es sospechosamente alto, cumplen las condiciones. Pero en la situación actual, con los tipos de interés tan bajos, Alvargonzález recomienda elegir aquellos en los que el plazo de vencimiento (aquél en el que se alcanza la rentabilidad objetivo) sea inferior a tres años.Ahora, los tipos están en mínimos históricos, por lo que seguramente no deseará que dentro de un par de años el objetivo de su fondo le parezca muy bajo en relación con la remuneración del depósito a un año.
Fondo de renta variable
La inversión debe contemplarse como un todo, valorando al rentabilidad que se espera del conjunto. Por tanto, se puede construir una cartera muy conservadora con dos productos como el depósito (que dará poco) y el seguro de ahorro (que dará algo más) y añadir para completar un fondo de renta variable. Es más volátil, pero también más rentable a largo plazo y con liquidez diaria. No se trata de poner todos los huevos en la misma cesta, sino una parte, por ejemplo, en un fondo de acciones de renta variable española. No debería representar más del 10% o 15% de la cartera de inversión. Lo peor que le podría pasar es que la cartera total de una rentabilidad baja, pero si le sale bien, superará con creces lo que habría obtenido colocando su dinero en un depósito. No hay que olvidar que puede ser mucho dinero si la bolsa sube, lo que no es algo imposible porque venimos de la mayor crisis bursátil de la historia reciente.
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