martes, 23 de junio de 2020

Buenos son!

Santa Bárbara creará «trescientos empleos directos» hasta 2023 en Trubia gracias al 8x8

En el centro, Rosana Prada, Juan Escriña y Enrique Fernández, acompañados de la inspección militar, visitan el taller de mecanizado de la fábrica de armas de Trubia. / FOTOS: JOSE VALLINA
En el centro, Rosana Prada, Juan Escriña y Enrique Fernández, acompañados de la inspección militar, visitan el taller de mecanizado de la fábrica de armas de Trubia. / FOTOS: JOSE VALLINA

El director ejecutivo de la compañía, Juan Escriña, asegura que el contrato está «en la fase final» de las negociaciones con el Ministerio de Defensa

ALBERTO ARCEOVIEDO.
El contrato para la fabricación de 348 unidades del Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8x8 Dragón por 2.083 millones de euros «va por la senda adecuada». El acuerdo, después de más de un contratiempo, «está cercano» y las perspectivas de crecimiento industrial, tecnológico y laboral para la villa cañonera son «muy favorables». Así lo manifestó ayer el consejero de Industria del Gobierno del Principado de Asturias, Enrique Fernández, durante su visita a las instalaciones de la fábrica de armas de Trubia, sede de Santa Bárbara Sistemas en la región. Un recorrido por las naves que conforman el centenario entramado fabril armamentístico en el que el director ejecutivo y vicepresidente de Artillería y Vehículos de Cadenas de la compañía, Juan Escriña, aprovechó para adelantar que la llegada del contrato generará la contratación de «trescientos empleos directos» entre finales del presente año 2020 y el 2023.
Acompañado por la directora general de Industria, Rosana Prada; del propio Escriña; y del delegado de Defensa en Asturias, el coronel Juan Luis González Martín, entre otros, Fernández destacó que la «posibilidad» de firmar el megacontrato en un «futuro inmediato dará un impulso» a las instalaciones trubiecas en cuanto a «producción, empleo y riqueza».
Además, añadió, supondrá un importante avance empresarial para el concejo y la comunidad autónoma, porque el 8x8 brindará «la posibilidad», reiteró, «de desarrollar tecnología de defensa nacional, lo cual puede generar contratos y producción para el futuro a nivel nacional, y de exportación en el ámbito internacional» de la defensa europea, sentenció el consejero a su paso por el taller de mecanizado para grandes estructuras.
El consejero de Industria y la directora general del ramo visitan las instalaciones de la factoría armamentística
A su alrededor, entre el trasiego cotidiano de trabajadores, esta vez menor debido a la nueva disposición en cinco turnos de la plantilla para mantener las distancias de seguridad, lucían en sus distintas fases de producción los vehículos Ajax para el Ejército Británico y las barcazas del Castor para el español. La comitiva también visitó el taller de artillería, donde los operarios ultiman un contrato de menor calado para el mantenimiento de obuses.
De esta forma, el 8x8 y las inversiones que supondrá en procesos e instalaciones, traerá consigo un salto tecnológico «muy importante», al incorporar la tecnología «más alta de Europa», añadieron, a su vez, fuentes del sector.
No obstante, señaló Fernández, «no podemos vender la piel del oso antes de cazarlo». El contrato está aún sin firmar «y tenemos que esperar a que se produzca». Aun así, continuó, «el acuerdo va por buen camino» y aunque falten «pasos por recorrer», desde el punto de vista industrial «es un contrato muy importante para Santa Bárbara, para Trubia, para Oviedo y para Asturias en la medida en la que va a suponer una importante carga de trabajo para los próximos años».
En concreto, aseveró Escriña, trescientos empleos directos entre el inicio de los trabajos y el momento de plena producción, que se sumarían a los 560 actuales, entre trabajadores de la empresa y subcontratados. Luego, los indirectos, aventuró.

Empleos indirectos

«Según la patronal del sector, cada puesto directo en una industria de defensa genera hasta once puestos entre indirectos e inducidos en la industria auxiliar y local», matizó. Por ello, relató a renglón seguido, «es un acuerdo muy importante para esta fábrica. Lo que estamos ofreciendo al Ministerio de Defensa es el producto sobre ruedas más avanzado del mercado, será construido totalmente en España con tecnología española». Sin embargo, sostuvo, para la esperada conclusión «faltan los pasos normales de un contrato con defensa, que son proyectos que luego viven durante muchos años, y también tardan en gestarse», expuso. «Estamos en las fases finales de la negociación de los detalles previos al contrato» de cara a la firma, que según Defensa se producirá durante el próximo mes de agosto.
Del mismo modo, el director ejecutivo de la filial española de General Dynamics también admitió que la nueva sociedad que, a priori, se hará cargo del contrato, formada por Santa Bárbara, Indra, Sapa y Escribano, aún no se ha formalizado. Se encuentra «en vías de constitución», advirtió, por lo que todavía se desconoce el nivel de participación de cada una de las cuatro compañías. Eso sí, en todo el proceso, Santa Bárbara será la empresa tractora e integradora del programa durante las sucesivas fases productivas (el total habría de llegar en 2035 con la fabricación 998 vehículos), donde Trubia será el alfa y la fábrica de armas de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, la omega.
Por lo pronto, al Dragón aún le falta un tiempo para llegar a ser una realidad completa. Ya lo adelantó la semana pasada el exsecretario de Estado de Defensa (recién dimitido), Ángel Olivares, al asegurar que las primeras unidades del novedoso blindado saldrán entre el primer y el segundo trimestre de 2022. En ese sentido, y según ha podido averiguar este diario, una vez firmado el contrato será la fase de acopio de materiales, que se demorará entre un año y un año y medio. Por poner un ejemplo, solo el acero que recubrirá las barcazas tardará entre nueve y diez meses en llegar a la factoría, pues solo dos empresas lo fabrican en toda la Europa continental.

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