El Gobierno acelera el cierre de la minería asturiana con el fin de las ayudas en 2015
Graciano Torre muestra su «desolación», tras el encuentro con el secretario de Estado de Energía, por una decisión que «supondrá el cierre de la minería»
29.01.13 - 00:17 -
El Gobierno central eliminará en 2015 las ayudas a la producción que reciben las compañías mineras, así como las subvenciones a las centrales térmicas por el uso de carbón nacional. Así se lo hizo saber el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, al consejero de Industria y Empleo del Principado, Graciano Torre, durante el encuentro que mantuvieron ayer en Madrid. Sin paños calientes. El decreto de restricciones de garantía de suministro, por el que se incentiva la quema del mineral español, «termina el 31 de diciembre de 2014 y no se prorrogará, por lo que a partir de ese momento no habrá más ayudas, explicó Torre tras la reunión. Y «tampoco habrá ayudas para la producción», lamentó.
El consejero mostró su «desolación» por una decisión que, en su opinión, supondrá «el cierre de la minería», pese a que el secretario de Estado considera que parte del sector puede competir sin necesidad de las ayudas y el decreto. Éste, señaló Torre, podría ser el caso de la minería a cielo abierto, que «causa grandes destrozos medioambientales y genera muy poco empleo».
El Ministerio de Industria, sin embargo, puntualizó en un comunicado que el Gobierno «está trabajando para que haya un sector del carbón competitivo más allá de 2018» y aseguró que «no existe ningún plan de desmantelamiento del carbón para 2015». Su objetivo es elaborar «una hoja de ruta» que permita construir un futuro viable y competitivo y que, contrariamente a lo estipulado en el plan 2013-2018 remitido a Bruselas , «permita que las explotaciones mineras que hubiesen recibido ayudas y sean competitivas, puedan mantenerse abiertas más allá de 2019».
Torre, no obstante, reveló que durante su reunión Nadal «en ningún momento habló del plan del carbón», aunque sí expresó su «voluntad de hablar de futuro con los sindicatos». Criticó que Nadal quiera incluir en esos encuentros a una nueva organización sindical (USO). Algo que, a su juicio, «será un elemento más de incendio de las comarcas mineras». Y pidió al Gobierno que mantenga su compromiso con la línea Sama-Velilla.
El anuncio del fin de las ayudas ha caldeado los ánimos. El diputado de IU en el Congreso, Gaspar Llamazares, aseguró sentirse «indignado» por este «final brutal» de la minería. Por su parte, la coalición asturiana recordó que la supresión de los incentivos a las térmicas provocará un aumento de la importación del carbón extranjero «manchado de sangre». Opinión opuesta a la de la presidenta popular Mercedes Fernández, quien ayer recordó que «con el gobierno de Zapatero ya se sabía que en 2018 cerraban las minas que necesitaban subvenciones y los socialistas estuvieron 8 años silentes». Advirtió, además, de que «fue en 2010, también con Zapatero, cuando se decidió que las primas a las eléctricas por consumir carbón nacional finalizaban a finales de 2014» y reprochó a Torre «saber muy bien lo que se firmó entonces». Las negociaciones «están abiertas», insistió el PP.
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