Enfocando la cámara de la F1 hacia la situación personal de Fernando Alonso, la imagen obtenida es la parecida a la de hace un año, cuando el asturiano reconocía que "Lotus, McLaren y Red Bull han estado por delante de nosotros todos el campeonato", (en este caso hay que sustituir McLaren por Mercedes y matizar que han estado por delante en la mayoría de carreras, no en todas). Sin embargo, la situación en la clasificación justamente a la inversa.
“Todo piloto está expuesto a un porcentaje estadístico de incidentes durante la temporada –algunos totalmente aleatorios-, factor crucial cuanto mayor es la igualdad entre los aspirantes. En este sentido, la diosa Fortuna está cortejando por ahora al piloto español con más mimo que a sus rivales”. El anterior verano, un análisis sobre el español en este periódico reflejaba cómo durante la primera mitad del campeonato su pilotaje no estuvo acompañado de ningún sobresalto en la pista… algo que vino a la vuelta de vacaciones. Este año, Alonso ha sufrido ya dos problemas mecánicos que le han costado dos carreras donde tenía posibilidades de victoria.
“Nuestros rivales se han despistado”
“Nosotros hemos intentado sacar lo máximo de lo que teníamos y nuestros rivales se han despistado”. Este es el resumen que hacía el propio español del sorprendente liderato con un monoplaza que tenía un potencial para acabar entre los diez primeros y ya. Doce meses más tarde se repite una película similar cuando Alonso afirma que conduce “el cuarto mejor coche de la parrilla”. Hace poco el bicampeón recordó que desde 2010 Ferrari no logra una ‘pole’ en seco.
La actual situación para el español es compleja, como ya lo era hace un año. Aunque, en esta ocasión, hay que sumarle que va por debajo en el marcador. No obstante, su “esperanza” antes del verano estaba depositada en lasevoluciones delF138 que espera para estas primeras carreras postvacacionales porque, desde el GP de España y salvo en Silverstone (donde Vettel abandonó cuando era líder) nunca ha terminado por delante del RB9 del alemán.
Mucha vida más allá de Alonso
Al margen de la particular pugna de Alonso por conquistar el título, la segunda mitad del año se presenta más que emocionante: los cuatro primeros pilotos de la tabla son de cuatro escuderías diferentes y están separados por menos de 50 puntos. Hungría dejó un sabor de boca excepcional para el aficionado a la Fórmula 1 viendo cómo Hamilton y Mercedes lograron batir a Red Bull con un coche inferior al de Vettel el sábado y siendo también inferior a Lotus el domingo. Mercedes demostró que puede ganar si ser el mejor del fin de semana.
Los nuevos neumáticos que se vieron en Hungaroring sentaron muy bien al W04, ¿serán claves para que Hamilton se acerque al liderato de Vettel en las próximas pruebas, dará Adrian Newey un salto en la evolución como lo hizo en las vacaciones pasadas, se mantendrá la tendencia que se ha visto hasta ahora o habrá algún equipo capaz de dar un paso adelante que deje a sus rivales sin opciones para luchar? Este domingo se empezarán a resolver alguna de las sabrosas dudas que nos dejó la primera mitad de la temporada, incluyendo si Alonso hará caso al tirón de orejas de Montezemolo