Como cada año, Amancio Ortega ha vuelto a romper la hucha para comprarse un inmueble de postín. Esta vez, el empresario gallego se ha ido hasta Londres para adquirir una nueva propiedad que sumar a su abultada colección. A través de su brazo inversor, Pontegadea, ha desembolsado cerca de 500 millones de euros (400 millones de libras) por hacerse con Devonshire Houseuno de los edificios más singulares e históricos del West End londinense, la cotizada zona que engloba los barrios de Westminster, Saint James y Myfair.
Antiguo lugar de residencia de los Duques de Devonshire durante los siglos XVIII y XIX, el actual complejo comercial y de oficinas fue puesto a la venta en octubre. En sólo tres meses, el equipo de Pontegadea ha cerrado la operación a pesar de no ser la oferta más alta, según fuentes del mercado inmobiliario londinense. La experiencia de Ortega como inversor en Londres ha sido clave para que el propietario de Inditex se llevara esta joya arquitectónica, que cambia de manos por tercera vez en sus 100 años de historia.
Frente al Hotel Ritz y junto a la parada de metro de Green Park, el histórico edificio se convierte en otra de las piezas inmobiliarias que Ortega acapara en ese eje comercial de Londres, donde el año pasado invirtió otros 150 millones de euros. De momento, Devonshire House incluye más de 16.258 metros cuadrados de superficie de oficina y otros 2.322 metros cuadrados de bajos comerciales con salida a Picadilly Street, una de las zonas más concurridas y cotizadas del área junto a Bond Street y Berkeley Square.
El empresario Amancio Ortega. (EFE)El empresario Amancio Ortega. (EFE)
El desembarco del empresario gallego en el West End llega en pleno momento cumbre. Conocido tradicionalmente por sus teatros y restaurantes, esta zona es ahora la más cara del mundo para el mercado de oficinas. Según un informe reciente de la consultora CBRE, la capital del Reino Unido ha desbancado a Hong Kong en el ranking de los lugares más caros para alquilar un espacio de trabajo. Los precios en esta área de Londres subieron el año pasado cerca de un 15%, lo que sitúa el precio medio por metro cuadrado en 156 euros al mes.
Como es costumbre desde hace ya muchos años, Ortega sigue alternando sus millonarias inversiones inmobiliarias dentro y fuera de nuestro país. Su última gran adquisición en el mercado doméstico fue también a finales de año, entonces al término de 2011, cuando adquirió la madrileña Torre Picasso por 400 millones de euros. La operación tuvo un factor de oportunidad dadas las circunstancias del vendedor (FCC), pero aúu así la cantidad representó un récord a pesar de la situación de crisis en el sector inmobiliario