El compromiso de Diego Costa con la selección española ha sido una de las noticias más importantes de este 2013 que ahora llega a su fin. La polémica reacción del seleccionador de BrasilLuiz Felipe Scolari, sirvió para que el delantero del Atlético de Madrid se reafirmara en su elección. La presión que intentó meter 'Felipao' para que Costa se replantease las cosas se le ha vuelto en su contra como un boomerang, y el jugador pretende ir al Mundial como el más motivado de todos los jugadores que en ese campeonato defenderán aEspaña.
Así lo admite en privado el propio Costa, y en su club aseguran desde hace semanas que el hispano-brasileño no sufrirá ninguna 'crisis de identidad' ni nada similar durante la disputa del torneo. De hecho, en Majadahonda se afirma que Diego acudirá a su país natal con el cuchillo entre los dientes, con ganas de darlo todo por la Roja.
Parece increíble que alguien que todavía no ha debutado con la actual campeona del mundo sea ya uno de sus innegables nombres propios. Más todavía se espera que lo sea durante la concentración que los hombres de Del Bosque tendrán en Curitiba a partir de junio. Costa, a día de hoy uno de los fijos entre los 23 que compondrán la lista definitiva, será el objetivo de todos los focos de la prensa y afición locales, que se espera sean más hostiles si cabe que durante el tenso ambiente vivido en la final de la pasada Copa Confederaciones.
La familia de Costa posa en la escuela patrocinada por el jugador en Lagarto.La familia de Costa posa en la escuela patrocinada por el jugador en Lagarto.
Scolari echó más gasolina al fuego posicionándose de forma tan beligerante en el ‘caso Costa’. La federación brasileña (CBF) llegó a pedir a las instituciones gubernamentales que se iniciaran los trámites para desposeer al jugador de la nacionalidad brasileña, aunque todo quedó finalmente en simples amenazas. E incluso se han hecho anuncios publicitarios donde se ponía de relevancia el daño al orgullo del país sudamericano que representaba la figura de Diego Costa.
Filipe Luis, cómplice en el vestuario atlético
El atacante rojiblanco no sólo no se ha dejado intimidar sino que su reacción, conocida por sus compañeros en el día a día del Atlético de Madrid, ha sido la contraria: venirse arriba y reivindicarse en el acierto que supone para él haber elegido a España. En esa animadversión que le produce ahora mismo Scolari ha encontrado un cómplice inesperado, Filipe Luis. El lateral izquierdo, internacional brasileño y con opciones, aunque remotas, de ir al Mundial con la ‘canarinha’, tuerce el gesto cada vez que le hablan de su actual seleccionador. Y Costa congenia con su compañero en esto, a la vez que tampoco entiende que Miranda no sea llamado nunca por Felipao.
El delantero valoró diversos factores antes de decantarse por España una vez haber disputado dos amistosos con Brasil el pasado invierno. El que más le preocupaba era el de la seguridad de su familia, residente en su país de origen. Todo su entorno le ha apoyado en esta difícil decisión, e incluso elalcalde de Lagarto, ciudad natal del jugador, aseguró estar a favor de que juegue con España. Pero son una minoría dentro del gigantesco país que acogerá la siguiente Copa del Mundo, donde Diego Costa está llamado a ser uno de los principales protagonistas.