Vá, representando al Santander.
ElConfidencial.com > España
AUSENCIAS Y PRESENCIAS: ESTUVO LUIS DEL RIVERO; FALTARON FRANCISCO GONZÁLEZ Y ALIERTA
Botín manda a Alfredo Sáenz a la presentación del programa económico de Rajoy
@Carlos Hernanz.- 25/06/2010 (09:51h)
Ausencias y presencias. El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha reunido hoy a destacados empresarios y representantes del sector financiero en un acto informativo para dar a conocer la política económica que llevaría a cabo en España y sus recomendaciones para salir de la crisis. En el desayuno destaca la presencia de Alfredo Sáenz, segundo de a bordo del Banco Santander. La cuestión no es baladí ya que se venía especulando sobre el representante que la entidad mandaría al acto debido a la notable afinidad de Emilio Botín con Rodríguez Zapatero.
Mariano Rajoy ha desayunado esta mañana en el Hotel Ritz. Lo hizo acompañado por buena parte de la clase empresarial y política del país, que acudió para escuchar el discurso del líder de la oposición, que había generado gran expectativa ante la eventual puesta de largo de las líneas maestras de su programa ecoconómico. Sin embargo, casi al tiempo que las palabras del dirigente popular, gran parte del interés pasaba por ver la lista de altas y bajas entre los asistentes al evento.
Una de las mesas de invitados con más pedigrí era la fomada por los constructores. No faltaron Florentino Perez (ACS), Luis del Rivero (Sacyr), Juancho Entrecanales (Acciona), Baldomero Falcones (FCC) o Iñigo de Meiras (Ferrovial). En el caso de los dos últimos, en representación de sus jefes, Esther Koplowitz y Rafael del Pino. Compartiendo mantel con los contratistas de obra pública estaba también el consejero delegado de Gas Natural Fenosa, Rafael Villaseca, al que acompañaba Víctor Urrutia como vicepresidente de Iberdrola. No estuvo presente el presidente de la eléctrica, Ignacio Sánchez Galán, que se encuentra hoy en Sudáfrica, ni el número uno de Telefónica, César Alierta.
Del mundo financiero, los asistentes más destacados han sido el citado Alfredo Saenz y su homologo del BBVA, Angel Cano. Fue más significativa la baja de Francisco González, presidente del segundo de los bancos. Estuvo presente el ahora cajero Rodrigo Rato, ex vicepresidente y ministro del PP, presidente de la fusionada Caja Madrid, y el presiente de Bancaja, José Luis Olivas, que no contaban con su contraparte de La Caixa y presidente de la CECA, Isidre Fainé. Tanto Fainé como su número dos en la caja catalana, Juan María Nin, tenían hoy que formalizar su fusión con Caixa Girona.
Quien no faltó fue el presidente de la patronal CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, acompañado por su cuñado y presidente de la patronal madrileña, Arturo Fernández. También quiso estar presente el presidente del Circulo de Empresarios, Claudio Boada, asi como el presidente de la patronal bancaria (AEB) Miguel Martín. Tampoco faltó el responsable de las Cámaras de Comercio y ex ministro del PSOE, Javier Gómez Navarro, que llegó acompañado por el diputado del PP, Vicente Martínez Pujalte.
Entre el resto de los asistentes, muchas caras conocidas, como las de Juan Jose Hidalgo (Viajes Halcón), Enrique Cerezo (Atletico de Madrid), Juan Carlos Ureta (Renta 4), Luis Atienza (REE), Ignacio López del Hierro (Thesan), Eduardo Montes (Ferroatlántica), Ignacio Gutiérrez (Citigroup), Luis Isasi (Morgan Stanley), Jaime Alonso (Banca Leonardo) y Juan Iranzo (IEE), entre otros muchos, mezclados todos entre si con representantes de embajadas y otros cargos institucionales.
Quienes sí acudieron en tropel fueron las huestes del PP. Rajoy irrumpió en el Ritz con una estudiada puesta en escena. El líder popular hizo acto de presencia flanqueado por las parejas formadas por Rodrigo Rato y Alberto Ruiz Gallardón, por un lado, y Jorge Moragas y Esperanza Aguirre, por otro. Antes, lo hicieron otros muchos espadas del presente y pasado del PP, como Soraya Saenz Santamaría, Cristóbal Montoro, Esteban González Pons, Pío García Escudero y los ex ministros Federico Trillo, Pilar del Castillo, Juan José Lucas, Jesús Posada, Isabel Tocino o Miguel Arias Cañete.
Tras un breve discurso de poco más de diez hojas, donde no incluyó ninguna novedad relevante y trató por muy por encima algunos de los temas de la agenda política y económica más relevantes, Rajoy recibió un tímido aplauso entre los asistentes. Aunque eran los salones de un hotel de cinco estrellas, no se precibió ningún susurro de “presidente, presidente…”. Tampoco codazos cómplices. Sin duda, lo más interesante lo reservó para el turno de preguntas. O no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario