Cicloturismo: lujo ‘eco’ sobre dos ruedas
Rutas por la Toscana o el valle del Loira, recorridos que alternan bici y barco por el Danubio para llevar el hotel a cuestas, vacaciones a pedales para descubrir nuevos paisajes, pueblos con encanto o ciudades europeas... No hace falta ser un gran deportista, y no hay problema si viajas en familia, hay para todos los gustos.
Naturaleza, vacaciones y bicicleta es una combinación perfecta para disfrutar y mantenerse en forma. El ciclismo está de moda, incluso en la gran ciudad, y quienes lo practican dicen que te da un sentido de la libertad único.
Si quieres desestresar y vivir unas vacaciones o una escapada diferentes, no lo dudes: da pedales. Hoy en día hay todo tipo de alternativas para conocer ciudades europeas, recorrer maravillosos paisajes y explorar la historia de los pueblos.
Cultura, historia, gastronomía, viejos castillos o monasterios, prados, viñas y majestuosos ríos serán tus compañeros.
Si te gusta adentrarte en la naturaleza y descubrir localidades con encanto, pon rumbo al valle del Loira -la región de Francia Patrimonio de la Humanidad- con cientos de kilómetros de rutas llanas para disfrutar de monumentos, jardines y castillos.
También hay recorridos por diferentes lagos o ríos de Europa, alternando barco y bicicleta, en espaciosos barcos de aire nostálgico donde la máxima es “tú pedalea y el hotel te sigue”. El Danubio, el segundo río más largo de Europa, con sus 2.888 kilómetros, permite disfrutar de numerosas rutas para cicloturismo con pensión completa y la posibilidad de pedalear a tu aire o de forma organizada.
Tampoco descartes una ruta por la mágica Toscana, tras una zona boscosa rodeada de olivares y lirios con un paisaje de ensueño... O sin salir de nuestras fronteras, un recorrido por la ruta Real de los Peregrinos, desde León a Santiago, con catedrales, castillos templarios y ciudades medievales.
Para viajar con niños y que las vacaciones se conviertan en una experiencia inolvidable, también hay alternativas diseñadas especialmente para familias, con distancias más cortas, hoteles familiares y numerosas diversiones. Cabe destacar una espectacular ruta de 170 kilómetros de Linz a Viena, o un recorrido fácil por la región occidental de Flandes, en una ruta circular a Bélgica por Brujas y el mar del Norte.
Una nueva forma de descansar y sentirse bien... La mayoría de los viajes incluyen alojamiento, guía con la ruta detallada y transporte diario de equipaje.
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