La Obra Social.....

Clave en las Nuevas Cajas....

Caja Madrid ahorra en Obra Social a costa de los centros de mayores

@Lucía Martín - 11/07/2010

Las vacas flacas pasan factura a la principal seña de identidad de las cajas, su Obra Social. ¿El último ejemplo? El cierre de los centros de mayores de Caja Madrid durante los meses de julio y agosto, lo que deja a 100.000 usuarios sin poder utilizar el servicio y a unos cuantos empleados, 150 según UGT, 44 de acuerdo con la caja, sin saber qué pasará con sus puestos de trabajo.

Mercedes, una antigua profesora de baile jubilada, echa pestes de su entidad financiera y no porque le hayan cobrado una comisión de más o porque no hayan atendido el pago de algún recibo. Mercedes amenaza con llevarse su pensión a otra entidad porque Caja Madrid quiere cerrar el centro de mayores de Ciempozuelos al que ella acudía diariamente. “Tenía una oferta amplia: tai chi, bailes de salón, gimnasia, ofimática, senderismo… El que queda, del Ayuntamiento, es peor. Lo de cerrar los centros les hace la pascua a los trabajadores pero también a los mayores que los utilizábamos”, comenta indignada.

A finales de junio, la entidad presidida por Rodrigo Rato anunciaba a las empresas encargadas de la prestación de servicios en los centros de mayores que éstos echaban el cierre durante julio y agosto. En principio, sólo durante el verano. Pero los trabajadores afectados, 150 según UGT, 44 de acuerdo con la Caja, no se lo creen y denuncian que la Obra Social se resiente y que muchos de estos espacios no abrirán en septiembre. Tampoco los usuarios, unos 100.000, confían en que reabran los 39 centros destinados a este servicio (14 en la capital, 15 en la región, 9 en Castilla La Mancha y 1 en Ceuta).

Los empleados de Arjé Formación y Hartford, las empresas subcontratadas, se quejan de la hipocresía de la entidad que se vanagloria de su Obra Social al mismo tiempo que presenta beneficios y recorta la inversión para fines sociales. La entidad, por su parte, reconoce que cierra un mes más de lo habitual (lo normal venía siendo que estos espacios estuviesen cerrados sólo durante agosto) por razones presupuestarias. “Hay menos recursos y hay que mirar más cómo se emplean. Cerramos en julio para ahorrar, es lo único que ha cambiado aunque es verdad que algunos centros, no muchos, se cerrarán definitivamente”, comenta un portavoz de la entidad. ¿Cuántos? “No podemos dar cifras, no lo sabemos aún, estamos analizando en qué zonas nuestra oferta es redundante porque coincida con otra ya existente”, dice. Unos diez o más, dicen los empleados…

La obra social se resiente

Las vacas flacas, instaladas cómodamente en la economía española, se dejan notar en el tesoro de las cajas, su Obra Social. Caja Madrid ha venido reduciendo estas cantidades en los últimos años. Mientras que en 2008 destinó a Obra Social 252 millones de euros, la cifra descendió hasta los 187 millones en 2009 y la previsión para 2010 es aún menor, 130 millones.

Pero la caja madrileña no ha sido la única en adelgazar esta partida, la tendencia ha sido generalizada aunque ha habido excepciones, como la de La Caixa. La principal competidora de la madrileña propuso en Asamblea General dotar a la Obra Social de 500 millones de euros en 2010, el mismo importe que en 2009…

El año en el que más dinero se empleó en Obra Social fue 2008: 2.058 millones de euros. Esta cantidad, que benefició a más de 142 millones de personas, provenía de los resultados de 2007, el más alto en la historia del sector (ver gráfico). En 2009 el gasto se redujo ya a 1.775 millones de euros… La dotación (dotación y gasto son diferentes, éste último siempre suele ser mayor) se ha ido reduciendo desde hace tres años: 1.952 millones en 2007; 1.604 en 2008; 1.107 en 2009. Y todo indica que la curva siga el mismo camino en 2010, pésimos indicadores como para que Caja Madrid reabra todos sus centros de mayores en septiembre próximo…

Las cajas de ahorro están constituidas bajo la forma jurídica de fundaciones de naturaleza privada, con finalidad social y actuación bajo criterios de puro mercado, aunque revirtiendo un importante porcentaje de los beneficios obtenidos a la sociedad a través de su obra social. Es lo que dice la web de la obra social de las cajas. ¿Cuánto dice la ley que han de destinar a la Obra Social? “Nada. Es uno de los grandes tópicos. No hay un porcentaje en concreto: la normativa establece que, después de pagar impuestos, las cajas han de destinar el 50% de sus beneficios a reservas”, comenta Javier Úbeda, de Ceca. “La media de dotación está en el 25%, normalmente el 75% del beneficio va a reservas, lógico, es la única forma que tienen de crecer”, continúa.

¿Se parecen cada vez más las cajas a los bancos? pregunta Mercedes, la profesora jubilada. A ella no le importan ni las cifras ni las dotaciones, se lamenta porque siempre pagan los mismos, los que menos tienen y porque no podrá seguir yendo al centro al que acudía todos los días. Curiosamente, para poder utilizarlo, la entidad le exigió domiciliar su pensión… Al final tendrá razón Mercedes cuando se pregunta si las cajas se parecen cada vez más a los bancos, porque, si la obra se llama social, ¿por qué utilizarla como medio de captación de fondos?