El precio de la gasolina en España,
entre los más caros de Europa
La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha
vuelto a poner en evidencia, en un nuevo informe sobre hidrocarburos,
que “los precios antes de impuestos y los márgenes en España” de la
gasolina y el gasóleo “siguen estando entre los más altos de la UE y por
encima de los de economías de tamaño comparable”.
La CNC lleva ya tres años publicando informes sobre el sector, y en
todos ellos, de forma más o menos intensa, ha advertido de deficiencias
en el grado de competencia. El nuevo informe arremete contra algunas
prácticas del sector y advierte de “comportamientos de los operadores “
que pueden ser “contrarios a la normativa de competencia”.Sin mencionarlos, la CNC se refiere a las gasolineras de Repsol, Cepsa, BP, Galp y otras compañías. La CNC está presidida ahora por Joaquín García Bernaldo de Quirós, pero mantiene la tesis de sus informes año tras año.
Cohetes y plumas
La CNC vuelve a poner la lupa sobre el denominado fenómeno “cohetes y plumas”, en referencia a que las subidas en el precio del barril de petróleo se trasladan de forma mucho más rápida (cohete), al precio final de la gasolina y el gasóleo, que las bajadas (pluma).
El nuevo informe de la CNC, a diferencia de otros años, llega en un momento especialmente crítico. El Gobierno prepara un nueve paquete de medidas de reforma energética para paliar problemas históricos como el del déficit de tarifa eléctrico (el agujero financiero que existe en el sistema eléctrico porque los precios de la luz no cubren sus costes).
Una de las medidas que se está barajando es la del llamado céntimo verde, que sería un recargo de varios céntimos por cada litro de gasolina. Lo que no está claro es si este impuesto lo pagaría solo el usuario, o habría también algún tipo de imposición a las propias petroleras.
Tampoco se sabe si ese recargo iría a tapar los agujeros del sector eléctrico (por ejemplo a financiar las subvenciones a las energías renovables), o sencillamente se lo quedaría Hacienda para tapar otros agujeros del Estado. Lo único claro es que el informe de la CNC pone en evidencia que, dado el nivel de precios de los carburantes en España, y las asimetrías que existen, crear nuevas tasas para los carburantes va a ser un quebradero de cabeza para el Gobierno, y podría generar gran rechazo social.
La CNC se reafirma en “las conclusiones de los informes anteriormente realizados sobre la existencia de un reducido nivel de competencia efectiva y urge la puesta en marcha de las recomendaciones, ya efectuadas por el organismo”.
La CNC ha visto que, durante 2011, “los precios antes de impuestos y los márgenes en España siguen estando entre los más altos de la UE y por encima de los de economías de tamaño comparable, constatando que esto resulta compatible con un menor nivel de competencia a lo largo de la cadena de comercialización”.
Otra de sus conclusiones es que en un análisis provincial del mercado, se pone de manifiesto “la existencia de una relación directa entre la concentración de la oferta minorista (estaciones de servicio) y los precios medios antes de impuestos en la provincia”. Según la CNC, en las provincias con menos operadores, la gasolina es más cara.
Perjuicio para el consumidor
En cuanto al fenómeno “cohetes y plumas”, la CNC asegura que su informe se basa en el estudio de varios años. En concreto para el periodo 2005-2011. A lo largo del tiempo, en España “se confirma la existencia de asimetrías en la velocidad de ajuste de los precios minoristas antes de impuestos en respuesta a variaciones en los precios internacionales del carburante”.
Esa asimetría es más evidente para la gasolina 95 que para el gasóleo A. Las asimetrías, en cualquier caso, “suponen un perjuicio para los consumidores finales”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario