miércoles, 11 de julio de 2012

Transp....Financiero, de Caja a?

¿Y qué será de La Caixa?

Las condiciones del rescate bancario pone fin a un sector que hace solo un año y medio superaba el 50% del sistema financiero español, las cajas de ahorros. Según las condiciones del Eurogrupo para inyectar fondos a las firmas españolas que lo necesitan todas las cajas de ahorros parece que se tendrán que desprender de sus participaciones bancarias. En la práctica esto significa que las cajas no podrán realizar actividades financieras directa ni indirectamente.

Una gran parte de estas entidades, las nacionalizadas, como Bankia, Catalunya Caixa, Novacaixagalicia o incluso CAM, cuyo banco fue vendido a Sabadell, o Unnim, con su banco vendido a BBVA, ya ha dejado sus participaciones bancarias, e incluso están dando los pasos para convertirse en fundaciones. El gran enigma es La Caixa, que controla Caixabank, y que siempre ha sido contraria a transformarse en fundación y a desprenderse de su filial bancaria. Pero parece que ahora lo tendrá que hacer. Son las consecuencias de sufrir el rescate del sector, pese a que la firma catalana haya hecho sus deberes y haya sacado nota. Fuentes bancarias señalan que además, Isidro Fainé, presidente de La Caixa, Caixabank y de la patronal de las cajas que quedan, CECA, debería por este último cargo dar ejemplo por muy difícil que sea. Ahora sí es el fin de un sector que nació hace 300 años, y cuya finalidad inicial era evitar la exclusión financiera de la población. Además carecía de ánimo de lucro, razón por la que sus beneficios (cuando los había) se repartían entre la obra social y sus reservas. Parece que el destino de estas entidades, las cajas, será convertirse todas en fundaciones, explican varias fuentes. Si es así, puede que estas fundaciones sí podrían tener bancos, caso de Italia. De esta forma, La Caixa podría conservar su banco, pero con cambio de estatutos. Las cajas de ahorros eran las grandes desconocidas internacionalmente. Su estructura era incomprensible para el mercado. Y es que una entidad financiera no podía ni debía estar ligada al poder político y las cajas no hicieron nada para evitarlo y los Gobiernos regionales menos. Conclusión,las cajas han muerto y encima sin honores.

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